26 de enero de 2011

Smile


Odio tu increíble sonrisa, la odio, la odio porque cuando sonríes, me vuelvo totalmente impotente. Impotente por no ser capaz de apartar mi mirada de ella; de ti. No sé como lo haces, pero eres capaz de volverme loca con tan solo un movimiento y es algo ilógico porqué yo no soy una persona que se sorprenda a la mínima, es más, creo que hasta soy difícil de sorprender. Pero tú... tú eres diferente. Lo cambias todo y me cambias, me vuelves mejor de lo que soy. Sacas todo lo bueno de mí y haces que las imperfecciones sólo parezcan pequeños añadidos. Me haces perfecta y te haces perfecto. Y entonces, me entran unas ganas enormes  de besarte, de besarte para comprobar si realmente eres real. Si estas aquí y tú... tu vuelves a sonreir y el mundo se me viene encima.

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