23 de febrero de 2011

Like shooting stars

Tu voz susurrando en mi oido, tu sonrisa cuando mas la necesitaba, cuando tu mirada se encuentra con la mia, cuando apoyo mi cabeza en tu pecho y siento tu respiracion, el que me digas te quiero sin venir a cuento, que me hagas descojonarme de la risa por cualquier gilipollez, poder abrazarte cuando todo va mal, un toque a las tres de la madrugada, un sms que te saca tu mejor sonrisa, sentir ese tripi que te sube por el cuerpo cuando te veo, besarte y desear que por nada del mundo termine ese beso.

22 de febrero de 2011

C'est la vie


La vida es corta. Rompe las reglas, perdona rápido, besa lentamente, ama verdaderamente, ríe incontrolablemente y nunca te arrepientas de nada que te haya hecho sonreír.

Voy a pensar en ti...

Únicamente en ti...

21 de febrero de 2011

Te acostumbrarás

Te acostumbrarás. Te acostumbrarás a mi voz, a mis expresiones, a mis cambios de humor, a mis miedos. Poco a poco te irás dando cuenta de las pocas cosas que te gustan de mí y de las miles que odias. Odiarás mi forma de pensar, de expresarme, de andar. No aguantarás leer mis mensajes, ni escucharme hablar durante horas. Tampoco te gustará mi forma de afrontar los problemas, ni mi manera de plantearlos. Odiarás tantas cosas de mí que ni siquiera sabrás ver las buenas. Olvidarás esa sonrisa que tanto te gustaba, esas palabras, esas miradas. No te acordarás de mi apoyo y ayuda, y menos aún de cómo y cuándo nos conocimos. Dirás adiós a esas noches en las que ya no podía dejar de hablar. Hablaba y reía. Tú reías conmigo. Olvidarás hasta mi teléfono. Olvidarás mi dirección. Olvidarás el olor de mi ropa. Olvidarás mi olor, mi calor, mi risa. Olvidarás cada milímetro de mi casa, cada segundo de nuestra historia.

14 de febrero de 2011

Catorce

Amar, es algo más que un te quiero
y se demuestra cada día, no un catorce de febrero.

11 de febrero de 2011

Go back

Me acuerdo de la primera vez que entré a esa sala. Había unos sillones de cuero marrones. Y unas neveras. Las personas que allí trabajaban tenían una cara sonriente y te saludaban por tu nombre, supongo que para hacerlo todo más llevadero; las otras no, aún recuerdo caras que expresaban todo lo que conlleva estar allí. Todos tenían una vía, con una sustancia negra, un líquido negro y espeso. Así que eso era, eso era todo, eso es lo que hace cambiar a una persona, un líquido hecho para curar, que mata. Me acuerdo de la primera vez que entré en esa sala, también me acuerdo de la última, porque no hubo más. No fui capaz de volver a entrar y aún no soy capaz de asumir que tú tengas que volver a hacerlo. No soy capaz de asumir que te tenga que volver a ver así...otra vez.

9 de febrero de 2011

Cerca del suelo

No necesito ropa; me arropa el olor de ayer.
No necesito ropa; me arropa el sabor, a miel.
No necesito que haya nada entre tú y yo; la piel.
No necesito nada de tu corazón; beber.
Quedamos cerca del suelo a la altura de tu cintura... o quedamos cerca del suelo donde se refleje la luna.

8 de febrero de 2011

Tú.

Seis mil millones de personas en el mundo, seis mil millones de almas... y a veces sólo necesitas a una...

7 de febrero de 2011

He vivido...y todavía vivo

  
He perdonado errores casi imperdonables, he intentado sustituir personas insustituibles y olvidar otras inolvidables. He hecho cosas por impulso. Me he decepcionado con personas que nunca me había pensado decepcionar, pero también he decepcionado yo a otras. He dado abrazos para proteger a alguien del mundo. Me he reído cuando no podía, he hecho amigos eternos, he querido y he sido querida. He gritado y saltado de felicidad, me he caído muchas veces, pero he sabido cómo levantarme. He llorado escuchando alguna canción y viendo fotos, he llamado a alguien solo para escuchar su voz, he pasado la noche despierta sólo para verle dormir, me he enamorado de alguna sonrisa. He pensado que me iba a morir de tanto echar de menos y he tenido miedo de perder lo que más necesitaba.

4 de febrero de 2011

2 de febrero de 2011

El equilibrio es imposible

Lo malo de las adicciones es que nunca acaban bien. Llega un momento en el que lo que nos ponía eufóricos, deja de hacerlo y empieza a doler. Dicen que no superas tu adicción hasta que no tocas fondo, pero... cómo sabes que lo has tocado? Porque por mucho que algo te duela, a veces, dejarlo, duele aún más.